lunes, 10 de septiembre de 2007

Demasiado pronto?

Esa mañana se había levantado a la misma hora de siempre. Tomó su café tras salir del baño, como cada día. Su mujer aún dormía, como siempre. Salió de casa una vez vestido y se dirigió con pasos decididos hacia el metro. Era un miércoles de septiembre de brisa fresca y un sol que aún no había terminado de asomar. Al llegar al metro detuvo sus pasos y miró el reloj: las 8. Demasiado pronto. Era aún demasiado pronto. Giró sus pasos lo justo para bordear la boca de metro y siguió andando, esta vez sin rumbo fijo. Estuvo caminando hasta que reparó en dónde estaba. Miró el reloj: las 9:35. Seguía siendo demasiado pronto.



Se sentó en un banco frente al mar y su mente le llevó a un tiempo anterior. Hacía muchos años que trabajaba en la misma empresa, que cada día laborable se levantaba a la misma hora y realizaba el mismo camino. Hacía sólo dos días que le habían jubilado. Sin embargo aún era demasiado pronto para imaginarse jubilado, para alcanzar el verdadero significado de su situación laboral: ya no tenía que ir a ningún lado cada día, ya no tenía que rendir cuentas a nadie, ya no tenía que renunciar a tantas cosas que quería hacer en tiempos anteriores por tener que trabajar.


Pero cada día de esos tres días ha seguido con su rutina de siempre....no es fácil adaptarse a los cambios sustanciales de la vida, aunque los hayamos contemplado/estudiado durante mucho tiempo antes de que acontezan. Harán falta muchos días para sentirse realmente libre, no sólo física sino también mentalmente. Hasta entonces seguirá levantándose a la misma hora y saliendo de su casa rumbo a la boca de metro. Y un día, quizás, se permita seguir en la cama, abrazado a su mujer, hasta que el sol brille alto en el cielo.

Imagen tomada prestada de la web de javierzurita


No hay comentarios: