Hoy primer día de septiembre me reincorporo al trabajo tras treinta y un días de asueto. Las reentradas a priori pueden parecer una kk, pero en el fondo de mí, aunque reniegue de tener que currar toda la vida, agradezco el escape obligatorio hacia un mundo donde sólo estoy yo: ni hijos, ni pareja...Aquí no tengo que preocuparme de nadie que no sea yo misma.
El día ha amanecido gris, como mi ánimo...pero tras media hora de intentar limpiar mi mesa de papeles, como mínimo para poder acceder al teclado del ordenador, aparece un tímido sol.
Volver a currar no es tan malo y más tal como están los tiempos, lo jodido es que no tenga más cojones que hacerlo....
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3 comentarios:
eres una workoholica? jajaja
bsos!
Mucho me temo, Neo, que sí....otro vicio más a la lista.
Un besazo!
Toc Toc
¿que tal guapa?
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